HOY

Yo quería escribir de ayer, pero a Ayer… Hoy lo dejó en el pasado, una capa más de suelo en mi tierra de los recuerdos.

Ayer se lo llevó un aguacero lento, se fue en una guitarra imposible, en un grito del cielo, se metió en un cristal, se lo fumó un impulso, se lo llevó un silencio del cielo, lo curó un venado y lo durmió un milagro.

Hoy llegó con un sol con pupusa en kensington Market, un papá columpiándose con la hija –en dos columpios grandes- un vuelo de palomas en el cielo muy cerca al suelo, un parcero que tiene 50 pero parece de 40 también estaba en kensington, 3 camisetas por 5, sushi de almuerzo, unas horas con Darío –mi ex marido- una bajada que no subí, un café con ducales, humos contra el sol –un visualizador de sentimientos- un montón de platos… mucha agua pasó por mis manos.

Cuando estamos perdidos caminamos en círculos, un acto cíclico de entendimiento o un patrón de conciencia, volvemos al mismo lugar donde nos perdimos y vuelve y juega, si… sentarse a meditar y visualizar la salida antes de ir a buscarla, es mi mejor salida , porque las salidas no están afuera, ellas habitan el espíritu, se hacen visibles a través de la intuición, de la intención, del amor, de la sabiduría, del respeto, de vivir mas cerca al centro, donde todo se conecta infinitamente y una luz traza los caminos que recorremos… ayer era de noche, en las noches es mejor hacer un fuego, hablar con las estrellas, cantarle al viento en coro con el resto… el resto de corazones que están latiendo al tiempo -latiendo-

El cuento cambia todo el tiempo... no me quiero perder y por eso voy atento.