PAZ A BORDO

Esto fue lo mejor que pude hacer con los ultimos 2000 pesos colombianos antes de abordar el avion que me dejará en Caracas a las 12:00 am como a una princesa, 15 minutos para contar esta chocoaventura de salir de mi pais sin ser vista, se siente frio en las piernas y el corazon que se va corriendo cada que un policia me pide identificación, las fronteras me siguen pareciendo un indice de esclavitud tan claro que prefiero ser cualquier pez en el mar, las caras de robot de cada persona que trabaja en este negocio me quita la respiración, pero bueno ya pasé el primer paso, a las 9:40 pm sale el avión y de ahi a dormir en el tapete mas cómodo que me encuentre hasta las 6:00 am de Caracas rumbo a Mexico... será interesante ver a ciudad de Mexico desde un avión, una de las maquinas mas grandes de este sistema y después por fin llegar a mi casa en Toronto.

CAOS VEGETAL

Vengo pensando en prosa hace días, con ganas de escribir tempestades de ideas que se han cruzado en este viaje que ya casi llega a su fin, me siento y nunca tengo el tiempo suficiente para poner en letras lo que he dejado en huellas sobre este suelo, la patria, la tierra, las raíces que no hay quien las arranque porque ya están volando, ya pueden ver la tierra en la que crecieron… y es que desde el cielo todo se ve diferente…

Una playa celeste me enseñó que la percepción del mundo cambia con la soledad de una playa llena de estrellas enterradas por las olas, estrellas brillantes en el cielo, estrellas en el pensamiento, la comida que crece en el camino del silencio sabe a verdad, el jugo de esas frutas es tan verdadero como la presencia del árbol, no existe la guerra en playa celeste, no existe casi nada de lo que se vive en el ruido de las ciudades, pero al parecer el ruido es algo que existe en muchos niveles, el caos y la violencia lo encontré en un caminito para pasar las rocas a cambio de la marea que estaba muy alta, un caminito con plantas que aun no están en paz y decidieron sacar sus garras- las espinas repartidas por todo el tallo y hasta en las hojas, yo puse toda mi conciencia en cada paso, un paso a la vez, lentamente por ese caminito del caos vegetal, pero el ritmo no elimina el caos, el existe a pesar de todo y lo mejor que pude hacer fue regresar y enfrentar la marea, me senté un rato a pensar en eso, en que estamos metidos en algo que es inimaginablemente grande y caminamos sobre los mundos inimaginablemente pequeños, que no somos los únicos que generamos vibraciones caóticas, que el contraste de luz y oscuridad existe en todos los niveles y se expresa en infinidad de lenguajes, infinito es la respuesta a todo aunque es claro para mi que la infinidad no te salva de la responsabilidad, pensar en el comienzo de todo o el fin de todo es perder la cabeza, pero cuando pienso en infinito las preguntas se resuelven solas porque las respuestas también son infinitas y al fin el resultado es la experiencia de estar vivo en un tiempo presente… cuando me vi los pies con diminutas cortaditas que dejaron las plantas entendí que todo lo que existe es una parte del proceso y que lo único que puedo hacer es buscar los caminos que se ajustan a mis pies… a mis zapatos, no hay nada mas, salvar al mundo es mas fácil cuando me salvo de estar en una vibración que no es la mía, estar conciente de que todo existe con el mismo propósito –estar vivo- me pinta las alas de libertad, las conexiones con los seres que van por mi camino siguen siendo mágicas, los sueños del futuro son solo las proyecciones de mi presente, y el ego que me mantiene de carne y hueso lo sigo diluyendo en agua y viento para que no se vuelva tan duro.

Me voy a conseguir colores de boda, el arte en telas que le hagan rito a las promesas de amor de Iván y Ángela, mañana juraran amor en una iglesia, espero que el juramento sea mas que eso, espero que mas allá de una fiesta y el vestido blanco este la conciencia de un amor libre y eterno en ese nivel, un amor capaz de transformarse y comunicar sin miedo los cambios de piel, porque todo cambia, todo se transforma y los juramentos son palabras vivas que cambian con el tiempo-crecen-

A la minorista a ver que hay de segunda, a las casas de las amigas a ver que colores tienen, a mi maleta a ver que me encuentro, a la casería de hongos mágicos… hoy es viernes no hay nada que un buen viernes pueda solucionar.